Es difícil poner "puertas al campo". Se acerca el otoño, no bajemos la guardia. Hay que recordar que la espiga es la estructura con forma de corona que se encuentra en la parte superior del virus (de ahí su nombre) y que se adhiere a las células para infectarlas. Y ésta es precisamente la clave de todo: a mayor mutación en la espiga, mayor contagiosidad, según los científicos, menor efecto de las vacunas. Es decir que, si la subvariante de Ómicron BA.5 ya preocupaba por ser más contagiosa que la original, Centaurus podría serlo muchísimo más. Potenciemos nuestro sistema inmune; con acupuntura sin agujas, Restauración Bioenergética , se puede y si además ingerimos el aporte necesario de vitaminas y oligoelementos, podemos vencerlo. "Porque lo importante es tener un buen sistema energético, capaz de despreciar el poder patógeno del germen..." Creo que ya todos nos estamos dando cuenta que el cambio climático no era solo la subida de las temperaturas, sino el cambio en los microsistemas y por lo tanto la aparición de nuevas mutaciones, en todo.
Cada vez son más intensas las influencias del medio sobre el ser humano. El lugar geográfico donde habitamos es determinante, la longitud, latitud, altitud y la orientación van a influir en nuestros canales energéticos. Pero además, por desgracia, hoy en día nuestro medio “está cambiando”. Los influjos bioclimáticos, las cinco energías cósmicas: “calor, frío, viento, humedad y sequedad” están alteradas (cambio climático). El calentamiento global, la escasez del agua, ríos, lagos, mares, las radiaciones, los rayos ultravioletas, los campos electromagnéticos, modifican nuestras respuestas al medio apareciendo nuevas alergias, intolerancias alimentarias, las geopatías, tema tratado recientemente.
Da la impresión de que nuestros ancestros eran más fuertes, quizá lo eran, pero no descartemos que comieran más sano que nosotros, más natural y menos elaborado. Los alimentos nos enferman, o bien porque no son biocompatibles con nuestra energía, o bien porque están modificados en si mismos, refinados, enriquecidos, en definitiva, adulterados, causándonos trastornos endocrinos, alteraciones del tiroides, diabetes, obesidad...
¿Por qué a pesar de analíticas normales, el sistema endocrino no funciona correctamente? Debido a estos cambios, no podemos seguir anclados en los puntos tradicionales que siempre hemos manejado. En las infecciones por Covid, por ejemplo, hay que avanzar un poco más, descubriendo mediante el test de Kinesiología nuevos puntos eficaces para mejorar nuestra defensa, ante las nuevas variantes.
Hasta ahora:
- la fatiga
- la tos
- la fiebre
- dolor de cabeza
- dolor muscular
Son dolencias comunes en las personas infectadas. Sin embargo, el Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica señala también: la diarrea. Es decir, que si ésta se presenta, debemos testear los puntos del intestino y no solo los de pulmón, comprobando si, con el test, piden adhesivos RB Yang o Yin.
Los puntos a probar serían los siguientes:
Claro que esto a nosotros no nos extraña, ya que por M.T.C. sabemos la relación que existe entre estos dos meridianos acoplados, el pulmón y el intestino grueso, pertenecientes al “movimiento metal”, y que como también sabemos tienen su momento crítico ahora en otoño.
En otros artículos ya hemos hablado de la importancia de la microbiota. Quizá ésta nos podría dar pistas de por qué unas personas reaccionan de diferente manera ante la infección y son más resistentes o con manifestaciones más benignas. Esto quiere decir que nos deberíamos de estar preparando. Soy consciente de lo difícil que es que las personas acudan a las consultas de acupuntura, aún estando con los síntomas, cuanto más complicado que lo hagan cuando no los tienen. Pero así debería ser, la acupuntura es preventiva y debería utilizarse de esa forma. Además los síntomas nos pueden sugerir un cierto desajuste en un órgano, aparentemente responsable, pero en realidad esa clínica puede estar originada por otro y eso es lo que debemos averiguar. Esa es la diferencia entre un buen profesional y uno mediocre. Aún hoy en día hay muchos acupuntores que se guían por los síntomas, grave error.
Pongamos un ejemplo, con algunas posibles hipótesis:
Síntomas típicos de exceso de yang en el Corazón, que pueden estar ocasionados por un:
- defecto de la raíz yin del Riñón que no alimenta lo suficientemente a la raíz yin del Hígado y como consecuencia la raíz yang de éste se dispara, aumentando en exceso la del Corazón.
- bloqueo en el Bazo–páncreas que impida el natural fluir de la energía del Corazón en su ciclo generativo.
- insuficiencia en la raíz yin del Bazo–páncreas que obliga a nutrirla incesantemente desde la raíz yin del Corazón.
¿Cuál sería el mejor tratamiento?
- eliminar el fuego del Corazón
- alimentar la raíz yin de Riñón
- desbloquear al Bazo-páncreas
- alimentar la raíz yin del Bazo-páncreas
A priori no lo podemos saber, porque la enfermedad no es monocausal, sino que existen múltiples causas y la confluencia de varios factores que provocarán el síndrome. Cuando occidente se interesó por la Medicina Tradicional China y comenzó a estudiarla y a practicarla, en la gran mayoría de los casos no prestó atención, por su gran complejidad, a la pulsología y sin embargo ésta era la manera de “leer” en el enfermo que tenían los chinos en su tradición o, dicho de otro modo, de comunicarse el paciente con su terapeuta. Por suerte, disponemos hoy de un método sencillo, en cuanto se ha practicado un poco. Hoy podemos hacer “hablar” a nuestro enfermo y que nos cuente que sistema en origen ha causado el desajuste. Este método con una evolución y excelentes resultados, de más de 25 años, es la Restauración Bioenergética que aúna los conceptos más puros de la Acupuntura con las averiguaciones de la exploración mediante el reflejo llamado AR por Raphael Van Assche, en Kinesiología Holística. La KH detecta estos cambios a través de la respuesta del tono muscular, concretamente a través del cambio en la longitud de los brazos AR (arm reflex), lo que estamos llamando en esta App: “dar respuesta”. Ocasionado todo esto, por un aumento del tono muscular en las cadenas musculares paravertebrales de un lado del cuerpo, con el consiguiente campaneo, la escápula y acortamiento del brazo. Esto hace que nuestros brazos parezcan de longitudes desiguales. Pura fisiología, nada de magia.